102.
He
citado a Joaquín Giannuzzi con una frase, y ahora dudo de ella. Supongo que
sintetiza una serie de recomendaciones del maestro, y contiene bastante de mi
experiencia. La frase es: para volar hay
que treparse a una mosca. La objetividad minimalista; antes lo mínimo
concreto, si de alcanzar altura lírica se trate, insistía el maestro. Dieciséis años después pregunto por
obediencia y rebeldías. Tantas veces dictó la sangre alzando a media altura y
fue baldía mi poiesis. ¿Quién desmiente al maestro?
… El sapo
alcanzaba / una región más vasta, / no extraña precisamente sino / ajena, una
manera / de sobrevivir lo exactamente necesario. / Precipitado, aventurado a la
existencia, / como un sapo simplemente, más allá / de la belleza / que da paz y
enloquece a los hombres / el único significado de todo eso / era la húmeda piel
verdosa, / vistiendo a un dios obstinado / en la razón secreta de sí mismo…
Joaquín
O Giannuzzi, poema “El sapo”, de “Las condiciones de la época”,1967
(c) Carlos Enrique Cartolano. "Scherzo", 2021
Ilustración: Por la senda del haiku (c)
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