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30 de junio de 2013

fiordo




aquí te explico
cuando la piedra impide rebote de onda
las alas se vienen mustias            transparentan
despliegan delgadas y disfónicas

así te digo               que ayer estuve mal
pasé
sumergido por cuestión tal que licua
floté en atmósfera
que cómo no
si evapora por espontánea
corrí sin piernas o gateé sin mi arrodillado
perdí en un día papilas y adeene

es que en tales ocasiones
calla mi voz
no hay eco que responda
la pared diluye
me extravía la desorientación        como quien olvida
su mirada prendida con anzuelos
                                     al cabo de la línea   

© Carlos Enrique Cartolano. Con el cantar se consuela, 2013

Ilustración: Gerardo Fontanes

unión libre




Mi mujer con nalgas de primavera
Con sexo de espadaña
Mi mujer con sexo de arenal de oro y de ornitorrinco
Mi mujer con sexo de alga y de viejo bombón
Mi mujer con sexo de espejo
         Mi mujer con ojos llenos de lágrimas
        
André Breton –Unión libre-

al fin de la guerra helena de pechos turgentes
viuda sí pero redimida        mitad de menelao viajó
con pasaje de estudiante
                            descubrió el sena fundó parís
y del segundo sexo fue primera factoría

superó en amantes a la penélope de graves
aunque prefirió la síntesis             fiel a soledades buscó
en la juntura el placer de los sentidos
laboró independiente de murallas ella rechazó al superior
con sus conquistas de tiempo y geografías

refundó en la costilla el cuerpo      en su alma gineceo
helena triunfó al comunicar gustos de su vida
más que intentarlo fue logro de simone en adelante
aunque como muchos yo prefiera
                            ser única deidad y sahumar altares

© Carlos Enrique Cartolano. Con el cantar se consuela, 2013

Ilustración: Wesley Acuña y Víctor Ulloa

en una





… el lenguaje es
su eternidad…
Gregorio Angelcos

una manzana tan sólo una en la mano     
sólo una mirada
acogió la razón de paris
una la diosa ante elena su espejo y en una las carites
fundidas por el ojo del pintor

pero sí parlantes gracias variaciones de la misma
melodía sabor de sólo un fruto
                                      aroma de la noche
que amor colma con luna en copa en lecho

ni dos ni tres en una la belleza el hechizo la alegría

únicamente elena paga mujer paga riquezas
y otra vez                        piedad y caricias de mortal
para la diosa herida en campo de batalla

quién ofrece eternidad        quién la recibe
sólo una mirada habrá        un voraz deseo entre las manos
y una fruta que circula con las ruedas
de mitología muralla de ciudades y lenguas predadoras

porque eres una                tanto te he pensado
cobijé tu gracia en mis edades
                                      aún con tiempo de los otros
y en manzana te comí mientras me hablabas

© Carlos Enrique Cartolano. Con el cantar se consuela, 2013

Ilustración:  Rafael -Las tres Gracias-


imposibles





digo en mi exánime de las siete sobre la mesa
cuando el silencio dibuja manteles
y la memoria borronea rostros en la ventana
no vino digo                               pero quién
se arrepiente de la espera
o acaso existen purgatorios del recuerdo

todo ha de seguir su curso habrá viudez
de viejas sensaciones                  cuando otras
traspongan mis umbrales de carrara
                                               fluirá
un fantasma de deseos y esparramará geografías

después
puede mudar el horizonte
que no me invada el miedo

© Carlos Enrique Cartolano. Con el cantar se consuela, 2013 

Ilustración:  Francois Legrand

29 de junio de 2013

antítesis




junto a quien hace está el que mira
se alcen cimientos para subir ladrillos o se sujeten
construcciones de mente              dará igual
irán por pares         operarios y curiosos

la carne crece la víscera retrae
cuando gotean palabras las mentes de neón
evaporan en altos              si gira una cuchara
empeñará en aterronarse la amargura

el ojo selecciona voluntad de propietario
pero siempre mira más allá                             del accidente
este hombre se atornilla               pero su rosca
enmohece y zafa               son atroces las huellas
del pavimento en coros populares

el arroyo soporta aluviones sube hasta sus bordes

aún mi espíritu corre manso en la creciente
pero lo corrompen lodo y alimañas          cae el sol
y precipitan con él teorías sedes toallas y vapores

© Carlos Enrique Cartolano. Con el cantar se consuela, 2013

Ilustración: Oskar Zabala (c)

27 de junio de 2013

frutos





no es el manto de una reina casual
éste es eterno

la blanca queja de una sierra advierte que alguien
oculto en el feriado            corta una tabla
y me alcanza
la lluvia de virutas el aroma siempre descubierto
de verdes en la sangre       también yo ardo entonces
con tus aserrines

y no es tu manto amor sino cuanto abarcas
ni son tus ojos sino estas miradas del encuentro
no tus sueños palabra        sino el prado
en el que duermes
ni siquiera tus puertas antes talla de la herida
no por ti        estás por el espacio que me ocupas
tampoco sólo presente memoria eres y proyecto
                                               inacabado amor
siempre en cosecha

porque regresas amor porque me buscas soy paciente
de tu lecho nacido ahora y condenado
con mi muerto                  no sólo de cultivado amor
también de otoños tus manjares

y no es tu manto amor sino cuanto abarcas

© Carlos Enrique Cartolano. Con el cantar se consuela, 2013

Ilustración: Johnny Palacios Hidalgo

26 de junio de 2013

palabra



     

yo sólo estoy acá,
tratando de decirlo
Valeria Pariso

el canto sí
esa fiebre antigua que crece con las uñas
y el cabello             este brillo en los altares
que da vida a marionetas
el nervio que agita carne melodía de convite
al alma                   de tránsito en estancia de llano
en pico al maremoto y al diluvio que devuelve

el canto sí que enhebra lengua
distingue suplicantes ilumina cuanto funde y arma
alumbra siempre     
condena de las sombras
padre del aire gorjeo del agua
pájaro en la víspera
sacerdote en cada tienda y en mi sangre

hoy levanto el instrumento soy verdad sutil jarabe
el quinteto que abre puertas relámpago que acaba
las oscuridades cuesta de conciencia natural idioma
bisagra del abrazo fanfarria de los besos punta y filo
génesis-maduro-esfera-extremo-culmen soy la vida

© Carlos Enrique Cartolano. Con el cantar se consuela, 2013

Ilustración: Anónimo del siglo XVI

25 de junio de 2013

nómina




de paseo por la esfera convicto del tiempo
esa ficción              barata cuando mi hacienda merma

tan caro fue al espíritu
puse todo en ansias de pasión       y después
encendí hogueras y relojes

                            hubo funciones de gala
entre bambalinas nacieron hijos
                                      el amor ahíto de vientos escuchaba
y todo se acomodó al doble surco
palas arado la semilla grana o amarilla               el sol al fin
eso fue en cercanías vibró la piel el orbe la curtía

es cierto poco queda que administrar de qué ocuparse
navega hondo lo sensible              está bien digo así la sonda
del encuentro acaba con relojes y fronteras
es ahora tributo de amor cada minuto      de negocios sólo guardo
cuanto cobra vida     ésto que es ofrenda del pasaje

© Carlos Enrique Cartolano. Con el cantar se consuela, 2013

Ilustración:  David Payo Ogando

24 de junio de 2013

consolatio




Inspirado en textos
del género clásico
todos deben morir    aún el más joven
dijo crantor de soli
o de cilicia               todos
y será consuelo volver
al seno de la tierra nuestra amiga

o nos concede acaso la vida
placeres prolongados         

sólo con más dolor
retribuye el sufrir esta existencia
no respeta al justo y ocasiones hay
                            en que premia al egoísta

y dijo crantor de soli
o de cilicia               para el consuelo
ha de lucharse
entre exceso y defecto de emoción
al rescate de paciencia      
                            arma prudente

oh la emoción tirana que vende al hombre
                            en los mercados
me pone de boca contra el polvo
por amor traiciona y entre amigos
                            me esclaviza

como el sabio estoico lidio y espero porque
todos han de morir   y nadie conoce
el orden ni al primero

© Carlos Enrique Cartolano. Con el cantar se consuela, 2013

Ilustración: Grabado Medieval

aparecido




al llevar al límite derecho el volante del agua caliente
termino de nacer me detengo en la dimensión del día
dispuesto a tu mirada al brote de sarmiento aparecido
no el mar no la playa en su izquierda ni arenas fatuas
mueven dolores de parto vendavales del alma inquieta

porque me miraste he nacido y navego en tus pupilas
de ese océano vengo un profundo mar los ojos negros
colonias fundaron tu carne con la mía en las caricias
que ser no importa y nada he de tener sólo la espera
divisa del alma material de sueño chispas del insomnio

nada es propio ni me anudan lazos de conquistadores

© Carlos Enrique Cartolano. Con el cantar se consuela, 2013

Ilustración:Luz Elena Soledad Abd-el-Kader


23 de junio de 2013

ilión





… como el ave solitaria…
José Hernández –El gaucho Martín Fierro-

los reencuentros son leña seca arden en lo que lleva
al pájaro estirar alas para el vuelo                    después
sus cenizas invaden mi reposo

memoria esa riqueza como el cereal en los depósitos
leal y paciente                            sometida al inventario
sintaxis del alma balance del goteo

estas son edades de pechos sensibles y duermo solo
                                                               para amar
armo mi nido           nunca se apaga la emoción fluyo
en subibaja de soles breves

por eso vacío las manos en el poema cuelgo sábanas
floreadas de primicia                             con cada amanecer
no simples miradas éstas gesto abreviado

amores de flancos enancados sones de las crestas arietes
de mi despierto                          en otoño aproximaciones
brevas pintas del último convite

© Carlos Enrique Cartolano. Contracorriente, 2013

Ilustración: Mercedes Fariña

22 de junio de 2013

poema 20




Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Pablo Neruda –Poema 20-


qué pretende mi voz a la mañana gris y silencio cuando
toda su carga se vuelca entre mis manos           qué dicen
tras los árboles y en cada esquina
donde tremola vivo este poema

él escribe su proclama en letras de sangre de carbón de humo
donde aún se doran las manzanas

ya amanece entre su visión de letra y tu mirada un cisne

y después con melodías de confluencia mi náufrago
rueda dientes azules en la playa
con arena imprime un beso
en tu congoja

cada día resucita el universo
porque somos otros conociéndonos los labios

porque no resten islas desiertas ni bizarros robinsones
nadie deje sueltas las barandas
y por eso no haya sorpresas en fondo de gavetas siempre quede
mostacilla perdida en los bolsillos             y en estantes
envejezca la mostaza

dice este poema de dos y el universo
desde vientos y mudanza
que nada acabe en mísero problema
de papeles              que hombre estalle            que reste lumbre
y tu diosa consagre amor en torno de la hoguera

© Carlos Enrique Cartolano. Contracorriente, 2013

Ilustración:  Grabado griego

tirones




esta cuerda frenesí y dolor a la vez manea sostén
de longitud desconocida                la tironeamos sí
hundidos en el juego o cautelosos
sólo ímpetus decidimos                espumas o brisa
lo demás nos viene impuesto

ya nadie discute                para tirar está la cuerda
si a espirales de la vida breve roce al íntimo perfume
al destino de la carne en esta carne
contenemos con miseria o egoísmo
qué nos queda sino barro reseco entre las manos

© Carlos Enrique Cartolano. Contracorriente, 2013

Ilustración: Gabriela Porras Flores

21 de junio de 2013

el último




los recuerdos subo a mis muletas de madera
y este olvido de hoy yace entre muertos            bien muertos
con historias sobre el mármol

lo más vívido es ahora la terapia intensiva del amigo
que quiere arrebatarme un buen ramo              de la crónica

cuando van de a dos la falla de un contacto
ocasiona la crisis del segundo
y así en cadena
porque puedo imaginar en progreso vacíos para el grupo

ya acepté que me canalizaran esta mañana                 y así
mejor fluyeran los regresos estos abrazos finales que tanto
nos preocupan
y hasta el mismo camino áspero
pedregoso
         previsible

© Carlos Enrique Cartolano. Contracorriente, 2013

Ilustración: Cristrina Alejos Cañada