236.
Derivamos atrás treinta y ocho años; besos y abrazos se fundieron en
este crisol de anuncios sin fronteras. Somos globales ahora, para vida y muerte:
amanecemos en China y almorzamos spaghetti en Piazza Navona desierta, mientras
escuchamos un batir de remos de Antonio abandonado por sus dioses. Después
volamos en alfombra irakí hasta alcanzar tierra natal, y somos bastante más, o
mucho menos que argentinos en manos de la pandemia.
La memoria escribe, y al hacerlo consuela. La lectura afirma y vence.
(c) Carlos Enrique Cartolano. "Scherzo", 2021
Ilustración: Carlos Gorriarena (c)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario