El
poeta va sobre una balsa. Ese leño que flota es el poema. El poeta trabajó largamente para construir un
timón, y ahora llora su fracaso. Exánime sobre esa balsa a la deriva, con
destino -se dice- incierto, ahora va desde el recuerdo, y náufrago sobrevive.
Sólo el poema se ocupa; la balsa sabe de mareas, puerto y fondeaderos.
En propia línea de
flotación, y derrotando al tiempo
(c) Carlos Enrique Cartolano. Pajareras imaginarias, 2018
Ilustración: Jennroig (c)
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