sin preexistencias el mundo se forma de vivientes no
hay
venecia sin vivaldi ni abandonos sin mozart aún sin mahler
las imágenes construyen palacios solitarios
no
hay pasajes que conduzcan las miradas
el verso es solitario son naturaleza del relato
soledades el que mira
dibuja sólo si contempla o testimonia cada línea una vidriera
de ojos incunables y de anteojos
quien
escribe necesita intimidades dialogando
así es que siempre en jardines de panales y placeres
reina soledad
disfruta el oro quien lo pesa destaca el brillo de la noche
sólo espejando tras la niebla y sus vestidos
se
blinda el hombre en aislamiento
© Carlos Enrique Cartolano. Del riguroso delirio, 2013
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