CONTENIDO DEL BLOG


5 de abril de 2012

Quintetos de voz y ñandubay





La mirada extraña cuando el horizonte aleja
Escasas campanadas y huele dentro de sí.
Un triángulo de luz adelgaza cuela y calla desde
Idéntico color. Lo breve triunfa: sólo la voz
Y el ñandubay florecen cuesta arriba del otoño.

Ahora se sostiene mejor el vuelo las melodías
Rotan a lo íntimo cortan la cautela del aire
Y el amor se amolda dulcemente en el poema.
Paralelos o a través del arroyo son más livianos
Los pasos como el agua: sólo la voz apura.

Ella y el ñandubay florecen en abril. Los sueños
Sobrenadan la fuente flotan las palabras arden
Con el viento con el vuelo con el sol que motea
La piel. Sólo flores y fotografías no cambian
En abril cuesta arriba del otoño. Ni flores ni voz.

Iridizado el aire en cada corte con cada sombra
Atravesada o paralela desde su voz su flor
De ñandubay perpetuando gozos. Confesiones
Sobran alfileres en plátano y castaño también:
¡No me confundas! ¡No me ocultes el invierno!

© Carlos Enrique Cartolano. De Negro de hueso, 2012

No hay comentarios.: